La policía de Houston, Texas, ha abierto una investigación criminal después de que al menos ocho personas murieran y decenas más resultaran heridas tras una estampida ocurrida en la noche del viernes en un festival de música en esta ciudad.
Las víctimas tenían entre 14 y 27 años.
La policía también investiga las denuncias de que un oficial de seguridad recibió una inyección en el cuello mientras intentaba inmovilizar a un asistente al concierto.
El pánico se desató cuando la multitud comenzó a empujar hacia el escenario del festivalAstroworld, en medio de la actuación del rapero Travis Scott.
Once personas fueron llevadas al hospital con paradas cardiacas y ocho murieron.
Unas 300 personas fueron tratadas por lesiones como cortes y moratones en el evento, al que asistieron 50.000 personas.
Además, las autoridades de Houston dijeron este sábado que hubo varias sobredosis de opioides en el concierto.
El jefe de bomberos de Houston, Sam Peña, detalló que el personal médico que estaba en el concierto tuvo que administrar «varias» dosis de Naloxona (un antídoto para las sobredosis de opioides), pero no dio un número exacto.
«Estoy absolutamente devastado por lo que sucedió anoche», dijo Scott este sábado. «Mis oraciones están con las familias de todos los afectados por lo sucedido», expresó en un comunicado en Twitter.
El rapero agradeció a la policía y a los servicios de emergencia y dijo que estaba «comprometido a trabajar junto con la comunidad de Houston para confortar y apoyar a las familias que lo necesiten».